Rescatan a dos montañeros despeñados por el barranco del Río Monachil

La Unidad del Cuerpo Nacional de Policía de Adscrita a la Comunidad Autónoma de Andalucía en Granada rescató en el día de ayer a dos montañeros que se habían despeñado por el barranco del Rio Monachil (Pradoredondo) en Sierra Nevada.

Los hechos ocurrieron sobre las 14:45 horas, cuando los agentes de La Unidad del Cuerpo Nacional de Policía de Adscrita a la Comunidad Autónoma fueron alertados por un ciudadano que informaba que dos personas habían sufrido un accidente, precipitándose por un barranco en la zona de Pradoredondo.

Una vez verificado el hecho, percatándose de la grave situación de riesgo en que se encontraban los montañeros, ante la imposibilidad de salir del barranco debido a la fuerte pendiente del terreno y la gran cantidad de hielo y nieve que dificultaba la tarea, los agentes, con medios propios de escalada, descendieron hasta conseguir con éxito el rescate de los accidentados. Los jóvenes estaban exhaustos por el esfuerzo ejercido al intentar avanzar por la ladera.

Según manifestaciones de los rescatados, de 22 y 25 años de edad, uno de ellos había resbalado por el hielo hasta el fondo del barranco, y su compañero, con la intención de ayudarle, también se precipitó cayendo al mismo sitio, teniendo que solicitar ayuda ante la imposibilidad de salir de allí. A pesar del cansancio acumulado y las horas transcurridas, los accidentados no presentaron lesiones de gravedad.

Ya desde el año 2004 la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma con sede en Granada, dispone de un núcleo de esquí compuesto por policías que han sido formados en dicha disciplina, equipados con el correspondiente equipo y material de montaña. Dichos funcionarios vienen ejerciendo sus funciones en la estación, para garantizar la protección de un medio natural tan singular y sensible.

Entre las funciones que desarrolla la Unidad de Policía Adscrita a la Comunidad Autónoma se encuentran la prevención en reventa callejera de ?forfait?, el control en pista de conductas inadecuadas que originan accidentes y producen inseguridad y alarma a los esquiadores, el auxilio y ayuda humanitaria en pista en caso de accidentes, la prestación de seguridad en competiciones deportivas y en los eventos especiales tanto nacionales como internacionales, y la prevención y control de otras conductas contrarias al medio ambiente que alteren los hábitats protegidos, así como las funciones de auxilio y protección al menor y control en materia de juego y establecimientos públicos.