El Huétor Vega, a un paso de seguir en Tercera

Pero no todo han sido alegrías en el camino. El Huétor Vega despidió marzo con una dramática derrota en Antequera. El entrenador hueteño, Rizos, trazó un plan inicial que no tardó en desmoronarse tras el tanto de los locales en el minuto 10. El gol de Corbacho para los malagueños acrecentó su dominio. Los pupilos de Rizos intentaron no salirse del guion previsto, pero apenas pudieron inquietar la meta rival. Poco después de la reanudación, Corbacho volvió a batir a Rubén para poner tierra de por medio. El Huétor Vega intentó acortar distancias sin fortuna. Ya en las postrimerías del choque, Tete firmó el tercero para los locales y Armando maquilló el marcador cerca del pitido final.

Otro momento vibrante se vivió en el derbi ante el Motril en Las Viñas, que el Huétor Vega perdió por la mínima. En el inicio, los hueteños no cedían la bola a su rival, conocedores del potencial ofensivo motrileño con el esférico en su poder. Por su parte, la escuadra costera buscaba lo propio para asaltar el área local y someter a un rival necesitado en la tabla que podía acusar más los nervios. El choque avanzó con dos conjuntos muy combativos que no encontraban grandes ocasiones y utilizando las bandas para buscar centros al área que no llegaron a concretarse ni a crear el peligro suficiente para poner en aprietos a los cancerberos.

Arañando puntos

Antes, los verdiblancos arañaron un punto vital frente al San Pedro (2-2). El Huétor Vega luchó hasta el final para no regresar de vacío en sus aspiraciones de permanencia. El choque comenzó de cara para los locales, que en un partido igualado lograron adelantarse en el marcador en el minuto 23 por medio de Antonio. El San Pedro volvió a golpear al filo del descanso, en esta ocasión gracias a un tanto de Cintrano, que remató una falta batiendo a Migue. Los locales ya saboreaban los tres puntos cuando el Huétor Vega, en un arranque de orgullo, logró igualar el marcador en unos últimos minutos frenéticos. Alberto firmó la igualada hueteña por partida doble: en el 88 y en el 93 conquistó un punto muy valioso.

Antes, otro derbi, recibiendo al Maracena, con empate a uno. Era un empate insuficiente. Dos conjuntos que trataban de distanciarse del descenso y que, tras un duelo disputado, solo permitía a ambos continuar a la misma distancia del corte de descenso con la que empezaban la jornada. El partido arrancó muy parejo, sin grandes llegadas. Cuando los equipos aún estaban tanteando el terreno llegó la jugada que rompió este estudio mutuo por parte del bando azulillo. El Maracena movió bien la bola hasta alcanzar el área hueteña y desde esa ubicación Isra Peláez envío el balón al fondo de las mallas para estrenar el marcador.