Javier Gallo: "El CD Huétor Vega es un equipazo que desconcierta a los rivales"

Su vida cambió cuando un ojeador apostó por él. Ahora, este joven hueteño ejerce con orgullo de pulmón en el centro del campo vistiendo la camiseta del equipo de su corazón. El CD Huétor Vega ha empezado bien la temporada en Primera Andaluza, con un Gallo en racha goleadora. El jugador, como sus compañeros, recibió con sorpresa y tristeza la dimisión del técnico, Marcos Rubiño, que abandonó el club hace unos días alegando motivos personales.

¿Lo de Rubiño ha sido un palo?

Con Marcos todo iba muy bien. Desafortunadamente nos ha tenido que dejar por razones que pertenecen a su intimidad y solo se le puede estar agradecido por lo que nos transmitió y por el fútbol que nos proponía hacer. Yo comparto su filosofía de juego, sobre todo en estas categorías. Si se juega de cualquier manera, al final conseguiremos que los campos de Primera Andaluza se queden vacíos. En cambio, si propones un fútbol de ataque, lleno de paredes y grandes acciones técnicas, disfrutan los jugadores y disfruta la afición. Sé que es complicado, sobre todo cuando enganchas una serie de resultados negativos.

¿Qué tal el nuevo entrenador, Francis Cascales?

No hemos tenido mucho tiempo para trabajar con él, pero parece que también viene con una filosofía parecida, queriendo ser dominadores de todos los partidos. Es bueno porque está intentando conocernos y de ahí adaptar su sistema a los jugadores que tiene. En los equipos que he jugado con una filosofia más conservadora no he disfrutado nada y, sinceramente, a día de hoy me costaría mucho volver a ese tipo de fútbol. Pero no hay que descartar nada.

¿Los jugadores esperabais un arranque liguero tan potente?

Creo que tenemos un equipazo. No hay que ocultarlo. Contamos con grandes jugadores y muy jóvenes. Pedrito, Idígoras, Joselu... ¡Nos han sorprendido a todos! Tienen unas capacidades técnicas alucinantes y el hecho de ser tan jóvenes les hace desconocidos para muchos rivales, lo que nos permite esconder nuestras cartas en los partidos. Ahora ya están empezando a conocerlos y se nos está haciendo más complicado alcanzar la victoria.

¿Y el ambiente en el vestuario?

También ayuda mucho. Hay buen ambiente. Se está formando una pequeña familia, con una combinación excelente entre gente joven y gente no tan joven. Se nota dentro del campo. De todos modos, aún es muy pronto para ver dónde puede estar este equipo a final de temporada. Nosotros vamos partido a partido, aprendiendo de los errores que cometemos y buscando mantenernos lejos de la temida zona de descenso, para poder seguir afrontando los partidos los domingos sin esa presión que te hace estar en una situación complicada.

¿Cómo es el día a día de Gallo?

Ahora mismo, mi día a día va totalmente encaminado al fútbol. Las mañanas son tranquilas, pero las tardes son un ir y venir de un lugar a otro. Además de entrenar con mi equipo, soy el entrenador del equipo juvenil de Huétor y también doy clases a los chicos de un colegio en El Padul. Combinar las tareas de entrenador con las de jugador me está resultando muy divertido, aunque algo estresante, porque también tengo que asistir a las clases del curso de entrenador.

Pasaste por la prestigiosa cantera del Villarreal. ¿Eres ambicioso?

Como jugador no tengo esa ambición que sí tenía unos años atrás. Me conformo con ayudar todo lo posible al Huétor Vega para que siga creciendo. Obviamente, siempre tienes esa ilusión de ir mejorando y subiendo categorías, pero no me veo ganando dinero como futbolista. Como entrenador es pronto aún ni tan siquiera para pensarlo, aunque es cierto que estoy disfrutando mucho en mi primera experiencia y sería un sueño el día de mañana poder vivir de esto como técnico.

¿Hay cultura futbolística en este pueblo?

Mucha. El ambiente de los domingos en Las Viñas es muy bonito. Se ve que hay mucha gente que toma como una tradición ir a ver a su Huétor Vega y es por esa gente, en especial, por la que intentamos darlo todo los fines de semana. El número de espectadores no es muy elevado, pero para eso estamos trabajando todas las semanas, para que poco a poco vaya viniendo más y más gente, y ayudar también a la directiva, que hace unos esfuerzos a valorar con las circunstancias que vivimos hoy día.

Hablemos de ídolos de infancia. Cuente, cuente...

Mi primer recuerdo es el de Michael Laudrup dando asistencias inimaginables. Recuerdo intentar imitarlo una y otra vez. Me han encantado jugadores elegantes como Redondo o Zidane. Raúl es mi ídolo de toda la vida, como buen madridista. Y Ronaldinho, el mejor jugador que he visto jamás. Una pena que no se cuidase e hiciese su carrera más longeva.

¿Messi o Cristiano?

Hoy por hoy, Cristiano.