La guerra en Ucrania afecta al Covirán Huétor Vega, que renuncia a pelear por la permanencia en Superdivisión

El motivo principal es que los jugadores se encuentran en la reserva para ser alistados. Pueden ser llamados a filas en cualquier momento y salir de su país podría considerarse deserción. «Ya de por sí fue muy difícil poder contar con ellos en el partido de ida, así como también les fue realmente complicado regresar a su país tras el mismo», reconoce el club granadino, en la máxima categoría nacional de tenis de mesa masculino.

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Debido a las restricciones aéreas que existen en la actualidad entre los países de la Unión Europea y Rusia, los vuelos que el club reservó fueron cancelados y hubo que buscar otros de urgencia pasando por Turquía.

Una vez descartado poder contar con sus principales jugadores, el club no dispone de otros que cumplan el requisito indispensable, según la normativa de la RFETM, de haber disputado el 40 por ciento de los partidos disputados en liga regular para poder participar en los encuentros de 'playoff', por lo que, de acudir con otros palistas, incurría en alineación indebida, más la sanción por incumplir la normativa.

Ante esta situación, el club hueteño no tiene otra opción que renunciar a pelear por salvar la categoría. El Covirán Huétor Vega pide benevolencia a la Federación dadas las circunstancias, nada previsibles, de fuerza mayor a consecuencia de esta guerra.

Esta ha sido una temporada complicada para el Covirán Huétor Vega, que se ha visto perjudicado por situaciones extradeportivas todo el año: plazos de vacunación y viaje de jugadores indios, caducidad de visados y, finalmente, la guerra entre Rusia y Ucrania.