Gala de color en Huétor Vega

Como es habitual en el pueblo, el acto representó un escaparate para demostrar la destreza adquirida en numerosas disciplinas en los últimos meses. Hubo exposiciones de pintura, patchwork, manualidades, costura, bordado de mantilla, escuelas municipales deportivas y la exhibición a los platos de la escuela municipal de djs.

La gala de clausura de los talleres municipales de Huétor Vega cerró el mes de mayo a lo grande. Cientos de vecinos llenaron el graderío del pabellón de deportes La Libertad. Una representación de todo el pueblo. Mayores y pequeños. Deportistas y bailarines. Pintores y coreógrafos. Artesanos y costureras.

Los alumnos y los monitores fueron los protagonistas de la gala. Entre los talleres enmarcados en el área de Bienestar Social, no faltaron Pablo Minguillón Puertas (pintura), Encarnación Segura Rosales (manualidades), Manoli Romero Armario (moda y costura), Laura García Palacios (bordado de mantilla), Inmaculada Piñar (encaje de bolillo) y Tatiana Jiménez (gimnasia terapéutica). Desde el área de Cultura, brillaron Eufemia Fuentes Llamas (flecos y bordado de mantón), Bernabela Moreno Alcalá (patchwork), Francico López Pérez (teatro juvenil y de adultos) y Ana Lachica Rodríguez (tejer a dos agujas).

«Soy de Huétor, pero he vivido fuera mucho tiempo. El fleco lo investigué en Dos Hermanas. El bordado es cosa mía. Lo he personalizado y lo he convertido en una creación. Hay mucho tiempo invertido en dar con dibujos y colores que no se ven en ningún otro sitio del mundo» , matizaba Fuentes Llamas.

Y las alumnas, ¿cómo han acogido este río de arte? «Se han ido especializando», aseguraba. «Han tenido libertad para encontrar su espacio natural. Unas apostaron por el fleco y otras por el bordado». El resultado maravilló a más de dos centenares de visitantes. Del mismo modo, destacaron las exhibiciones de pilates, de la mano de Cristina Militello, y el baile en línea de los mayores, capitaneados por Miguel Ballesteros Hita.

Curso provechoso

Bolsos, bordados, jarrones artesanales, pinturas, objetos de primorosa elaboración, mantones de Manila o trajes de gitana. El curso ha sido provechoso. Y las alumnas sonreían encantadas. Abundaban los gestos de satisfacción. «No solo es una ocupación; hacer esto me llena la vida», explicaba Cristina, una de las participantes en los talleres .

Otro que andaba por allí, estrenándose en estas lides, es el flamante dinamizador del Centro Guadalinfo, José Luis Salvador López, sorprendido del meneo que se traen entre manos en Huétor Vega. Aunque para sorpresa, la técnica de la que ya presume el combo de pinchadiscos de la escuela municipal de djs, liderados por el siempre afable Álvaro Ruiz Estudillo. Son adolescentes en su mayoría. Se reúnen los viernes por la tarde en los estudios acolchados desde los que antaño se realizaban los programas de Radio Contadero. Les gusta la música electrónica y también les gustan los botones. Su plan cuando comienza el fin de semana dista mucho del tópico juvenil. Ni videojuegos ni ligoteo. Ellos quieren aprender a ser pinchadiscos.

Por su lado, Imanol Cortés Aranguren, Ignacio Campos Alba, Antonio Alonso Martin, Pablo Girela Girela, José A. García Velázquez, Adrián Herrera Fernández, Lucas Sánchez García, Isaac Puerta Merino, Mario Pimentel Sánchez, José Miguel Núñez Lerma, José Manuel Laguna López y Juan Molina Fernández representaron a las escuelas de fútbol.

Mientras que por la parte de los monitores desfilaron Patricia Rodríguez Barrales, Patricia Molina Gallego, Anass Faray, María del Mar Martín Ávila, Blanca Ruiz García, Jorge Pérez Jiménez, Celia García Jiménez y Cristian Flores. Todo un cónclave de color. De vecinos inquietos que hacen de Huétor Vega un municipio multidisciplinar.